En verano la Guardia Urbana ha levantado 96 actas que han generado 20 Órdenes de cese de actividad, 32 en trámites administrativos y un caso archivado. Por otro lado, el distrito ha constatado que solo 19 pisos turísticos de los que dejaron de funcionar antes de febrero (cuando se presento un informe de actuaciones) han incumplido el cierre. La mayoría, ocho, están en el Gòtic. Desde que se aprobó la medida de gobierno para regularlos (abril del 2008), se han recogido 279 quejas referidas a 147 apartamentos. Entre el 1 de junio y el 31 de agosto ha habido 30 denuncias sobre 23 pisos, siete de los cuales son legales. Una docena son ilegales y no se habían detectado.